Tokio, 3ª parte: El otro lado de Japón; Akihabara, Odaiba y Roppongi Hills
A las buenas tardes!
En la entrada de hoy comentamos el 3er día por la capital japonesa, Tokio. En el itinerario de este día pasamos la mañana por el barrio de Akihabara (el paraíso friki y de la electrónica), la tarde en la isla artificial de Odaiba y la noche en uno de los barrios más modernos, Roppongi Hills.
Empezamos!:
- Akihabara (Electric Town):
Akihabara es el barrio de la tecnología de Tokio, en él podemos encontrar los últimos lanzamientos en tecnología: Ordenadores, pantallas de televisión, DVDs, series, videojuegos, realidad virtual… y un sin fin de tiendas de anime, figuritas de todas las clases, incluso cosas más retro, que no encontraremos en ningún otro lugar del mundo.
Para llegar a esta zona cogemos la línea Yamanote hasta Akihabara y, una vez en la estación, tomamos la salida de «Electric Town».
Recomiendo visitar esta zona en domingo, debido a que las calles (no la principal) son peatonales este día y la travesía será más agradable y cómoda sin aglutinarse en las estrechas «aceras» japonesas (realmente no hay aceras, solo unos pequeños pasos al margen de las vías por donde se puede andar).
Lamentablemente, no todo es tan bonito como lo pintan, ya que esta zona poco a poco se ha transformado en una trampa para turistas, especialmente para los americanos, y se hace difícil encontrar buenos precios salvo en tiendas especializadas en figuritas y objetos de segunda mano. A pesar de ello, es una zona que merece la pena visitar, ya sea para irse de compras o para vivir de primera mano la fiebre del anime en su estado más puro.
Aparte de las tiendas de anime y tecnología encontramos también tiendas de cartas y cromos, por mi parte aproveché para comprar algunas cosas en una de ellas, ya que en España las cartas en japonés cotizan al alza #SmartShopping ;D. Nada como callejear por el barrio para encontrarlas, algunas es necesario subir escaleras o tomar el ascensor para acceder.
Además de las tiendas de cartas, hay una tienda bastante conocida llamada «Superpotato», que vende toda clase de videoconsolas y videojuegos retro (y algunas consolas y juegos que no salieron de japón y algo de merchandising a buen precio). Además, la última planta es un salón recreativo en el que hay máquinas de juegos muy conocidos y que algunos recordamos perfectamente de nuestros tiempos mozos.
Tras pasar la mañana de compras, comemos en un Maid Café de Akihabara, concretamente en Maidreaming. En este tipo de restaurantes las camareras van vestidas o bien de Cosplay o de criadas inglesas y te tratan con extrema cortesía (aunque tú no las entiendas). El precio del menú es elevado, sin embargo incluye el espectáculo y un regalo asegurado. Dado que es difícil describir con palabras lo que ocurre en este local, os dejo un link con el vídeo de una de las actuaciones, sin duda volvería, fue uno de los momentos más divertidos del viaje.
Tras la comida dejamos las cosas en el hotel y nos dirigimos a Odaiba:
- Odaiba, Bahía de Tokio:
Odaiba es una (de varias) islas artificiales construidas en el litoral de la ciudad de Tokio y alberga una de las pocas playas que hay en la ciudad. Además de la playa hay numerosos centros comerciales, locales de ocio y hasta un balneario (y hoteles de lujo), aunque tal vez los más jóvenes reconozcamos esta zona por el edificio de la Fuji TV (que apareció en la conocida serie de dibujos animados Digimon).
Para llegar a Odaiba hay que utilizar o bien el monorrail o el barco, nosotros por nuestra parte cogimos el monorrail Yurikamome (que va sin conductor) desde la estación de Shimbashi. Este medio de transporte te da la oportunidad de ver el centro de la ciudad desde lo alto y, además, pasa paralelo al Rainbow Bridge. Merece la pena verlo por la noche, cuando se ilumina con miles de luces.
Una vez visitada la larga pasarela que conecta con las zonas principales, visitamos el edificio de la Fuji TV. Dentro del edificio está la tienda/museo de One Piece y Dragon Ball. Aparte, cuando fuimos, estaban dando un concierto en directo, muy divertido.
Merece la pena rodear el edificio, ya que desde su perímetro se pueden apreciar las vistas de la ciudad.
Después de la visita nos ponemos en marcha hacia nuestro próximo destino, el barrio de Roppongi Hills.
- Roppongi Hills:
Roppongi Hills es otra pequeña ciudad dentro de Tokio, no tanto como el barrio de Shinjuku, sin embargo tiene un encanto especial y una arquitectura moderna digna de ser visitada al menos brevemente.
Para llegar podemos coger el metro desde Shimbashi (línea Hibiya) hasta la estación de Roppongi. Es algo complicado encontrar el metro en la zona de Shimbashi debido a que hay que pasar por varias galerías subterráneas y la señalización es muy liosa, si lo hacéis armaos de paciencia o preguntad. y os ahorraréis un agobio.
Una vez en Roppongi Hills callejeamos por la zona para encontrar el Hard Rock Café de Tokio y hacer algunas compras, posteriormente visitamos el complejo comercial y el parque que lo rodea, donde hay una de las famosas arañas metálicas (pero que no encontramos) de la escultora Louise Bourgeois. También pudimos ver la sede de TV Asahi, donde emiten series tan conocidas como Doraemon.
Si sois fan de Dragon Quest, hay una taberna de Luda en la calle principal saliendo de la estación. No entramos, pero tenía buena pinta.
Ya acabando la visita pudimos observar uno de los problemas de Tokio, la contaminación lumínica, que deja estampas como esta, en las que casi parece de día.
Y poco más, una vez acabada la visita vuelta al hotel y a reponer fuerzas para un nuevo día.
Espero que os haya gustado la entrada de hoy, hasta el próximo post!